jueves, 23 de julio de 2009

"EL OTRO"



Excelente video que muestra la noción de El Otro,

un concepto Borgiano exquisito.
(Antes de correrlo por favor desactiva la música)




GEMELOS BORGIANOS

Sí, Jorge Luis,
te encontraste a ti mismo habitado en ti mismo,
te dejaste llevar de la mano por sombras que fueron tus sombras.
No pisas las hojas, tus pasos sostienen las letras que caen de la
tierra hacia un cielo carente de tiempo.
Cada palabra que roza tu traje desteje un camino.
En tu silencio amanece el arrullo de un sueño durmiendo,
él es ese espejo empañado de tiempo, él es ese joven,
el hombre imposible, el anciano, el Borges sin truco,
el criollo glorioso a merced de un bastón anudado a la niebla.
El laberinto tiene hojas de espejo, en ellas ya no hay minotauro,
ya no hay sino tigres, orientes, Simbad de capullos y el héroe impedido a
llegar al final de una historia inconclusa.
Sí, Jorge Luis, eres tú mismo en tus propias palabras.
Porque cómo se puede escapar del oscuro magneto una vez que ha
infestado el metal de la sangre.
Aún espera por ti la lozana palabra en la banca alojada detrás de
tus ojos.
Él es el fantasma y la fe de tus Dantes, él es el corcel de las mil y un
deidades que en ti se persignan.
Te encuentras sentado sin ver que un oleaje retorna el pensar que
jamás supusiste, ese vaivén de horizontes también es el joven que
escribe sin tregua.
Sucede que tú das inicio al poema y él viene partiendo del último punto.
Pero ambos son verso, los dos son califas, derviches del verbo y del
velo del tiempo.
Aquello que sueñan tus noches lo sueñan sus días y así hasta la aurora.
Sí, Jorge Luis,
dirán que inventaste ese sueño ignorando al zorzal que cantó en tus palabras.
Yo sí te creo, Jorge Luis,
y te creo porque a diario camino el brutal laberinto buscando a ese yo que
el Heráclito oculta.
No hay truco ni espejo, eres tú conversando contigo en Alephs de memorias.
Nada le debes al hombre inconcluso que inmola en su sueño el placer de
dos sueños.
La realidad parpadea en ocasiones hundiendo en la duda una ignominia ciega.
Yo sí te creo, Jorge Luis,
porque sólo tú mismo precedes en ti la amplitud de tus libros,
porque tú si encontraste en tu sombra el orgasmo del agua,
porque únicamente tus ojos marchitos comparten la dosis de amor que otro
sueño reescribe en tu misma mirada.

Fausto Vonbonek

5 comentarios:

  1. He leído el texto y he visto el vídeo de "El Otro". Puedes crerme si te digo que ambos me impresionaron. Es un escrito de una calidad extrema. Vayan mis aplausos como testimonio de mi admiración.

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  2. Sirena del marinero25 de julio de 2009, 1:19

    Mi querido amigo Fausto.
    Impresionante y maravillosos esta obra.
    Acompañada con el video de los otros hacen de ella una obra maestra.
    Mis felicitaciones y mi plauso van para usted.
    Mi cariño envuelto en un beso.

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  3. Fausto: Te vi en mi blog y vine a ver de qué se trata el tuyo, y... Como me gustó!! hermosa esta entrada sobre Borges, hermosas letras. Nos seguimos visitando! y bienvenido a Palabras sshh!

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  4. El Otro fue quizás el primer cuento que leí de Borges en mi adolescencia, cuando llegó a mis manos El libro de Arena. A diferencia de los personajes, nunca lo olvidé. Fue también mi primer contacto con una paradoja temporal que, desde entonces, me dejan la mente dando vueltas infinitas...

    Este video, sin embargo, nunca lo había visto. ¡Es hermoso! Como lo son tus letras, siempre laberínticas y provocativas. Y yo también te creo a ti que caminas buscando a tu otro... Creo haberlo visto con mis propios ojos.

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  5. Es increíble, Gitana, encontré este video siguiendo la pista de un Poeta ecuatoriano extraordinario llamado Jorge Enrique Adoum*. Me agitó el alma observar que el video de “El Otro” contaba con menos de 300 vistas. ¡¿Cómo es eso posible?! Te confieso que me embelesó la sangre. Ya perdí la cuenta de las veces que lo he visto y cada vez lo disfruto como vez primera. Cuando se trata del arte me torno en un niño que puede pasarse la vida admirando lo bello, como el Rodin cuando fuimos al cine. Y sí, tienes razón, las palabras de Borges nos dotan de alas, como Dédalos nuevos que intentan en vano escapar sin lograrlo de su propia creación: un laberinto de ideas y de letras que el Minotauro de Borges atrapa en su mundo infinito. Tú poesía es muy cercana a esa esfera infinita de fuerza y belleza. Y eso lo he observado con mis propios ojos.

    * Este es el enlace que muestra un asomo a la obra sublime de J. E. Adoum:

    http://www.youtube.com/watch?v=dTS9WHi0Nk8&feature=PlayList&p=42E441B30392BF16&index=12&playnext=2&playnext_from=PL

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