domingo, 24 de enero de 2010

LA VERDAD SOBRE HAITÍ BAJO EL DIABLO DE HAARP


Antes, existía una madre sabia que movía sus entrañas según el gravamen de “causa y efecto”. Se llamaba: Madre Naturaleza.
Hoy, hemos sido testigos de cómo se viola a esta madre que impávida observa morir a sus hijos. Este 12 de Enero, 200, 000 haitianos fueron ASESINADOS por HAARP, un arma (ya no secreta) del gobierno de los Estados Unidos que crea terremotos con ondas diabólicas de alta frecuencia. No puedo ni debo acusar a este mundo, sino a las mentes enfermas.
Desde este momento, además de esparcir Poesía, esparciré mi desprecio por esos cerebros carentes de aquello que hermana a los hombres. Creo en la hermandad y en los seres humanos, creo en el futuro y en la vida misma. Hoy, declaro ante el mundo mi total repudio a estos actos de pueril vileza. No acallaré mi denuncia ni discutiré con necios o ciegos que no abran sus ojos y su inteligencia por el bien de todos. HAARP está ahí, y es un arma mortal y tangible que debe anularse de forma inmediata. Aún tengo fe en este mundo y lo amo. Y ante todos ustedes prometo sumar mis esfuerzos, palabras y acciones con todo el conjunto de gente pensante que aún crea, como yo, en el futuro de un mundo que aún tiene esperanzas.
Necesitamos sumar, pensar y actuar de inmediato colectivamente. HAARP está afuera y activo y es una amenaza tan real como son esos muertos haitianos que ayer compartían su respiro y su pulso sanguíneo y hoy son cuerpos muertos por asesinato.
Hace unas semanas me pidieron con toda vehemencia que escribiera un poema sobre esta tragedia. La Poesía está presente, ella nació a ser la voz de un silencio que piensa en voz alta a través de palabras que irradia el paisaje, las cosas y el pecho.
La Poesía es la palabra que escapa a la inercia en la oruga y lo mismo convierte su cuerpo en dos alas sublimes que en mil dioses juntos que opriman en un solo puño este cáncer que mata la piel del planeta y la aldea de sus hijos.
La Poesía está muy lejos de ser tolerante, la poesía también encañona y también asesina, pero lo hace a través del amor; y los muertos que engendra son muertos felices. Así que este día ante todos ustedes mis musas y yo denunciamos en prosa esta horrenda masacre que ha sido gestada por causas humanas.
HAARP no son sólo unas siglas idiotas que matan. HAARP dista mucho de ser un motivo de orgullo y de logro erudito. HAARP es vergüenza, un ente cobarde de tecnología. Una aflicción, un tormento, una rabia… una sentencia de muerte.
Escribo estas letras y aún reina en Haití los hedores a muerte. ¡Qué insana desalma! ¡Qué golpe al planeta! ¡Qué genocidio tan más deshumano!
¿Por qué soportarlo nosotros? ¿Por qué masacrar de esta forma mujeres y tiernas criaturas? ¿Por qué nuestros niños? ¿Por qué nuestros niños?
Al cuestionársele a Einstein, considerado el padre de la bomba atómica, si había una manera factible de contrarrestar las bombas él fue muy certero al dictar su respuesta. Sí la hay ―dijo el genio más grande en su siglo― : La Paz.
El mismo Oppenheimer ―director del proyecto Manhattan creador de las bombas― terminó enjuiciado al volver su vista al pacifismo humano.
"Ahora me he convertido en La Muerte, Destructora de Mundos." Declamó Oppenheimer al ver la explosión de la bomba.

¡Este es nuestro mundo y en él reclamamos a tiempo el respeto a la vida y también al planeta!
Vivimos el filo de un tiempo que escinde dos siglos: El XX que marcha al pasado llevando en su espalda el costal con sus Guerras Mundiales y todos sus muertos, y un siglo XXI que inicia con guerras y que ha recibido de herencia la peste del sida, de gripas aviares y gripas porcinas y más turbaciones.
Bastante problemas tenemos ahora para sumar al estrés de un presente que ve derretir sus ‘eternos glaciares’ la atrocidad de un invento que humilla a un planeta y que viola a una madre.

Reitero que estamos a tiempo. Ya hemos sido testigos de frívolos muros que caen levantando en su polvo ilusión y esperanza.
No debemos ―por ningún motivo― esperar a que HAARP y otras más ignominias destruyan lo poco que queda y que puede ser mucho si actuamos a tiempo.

Somos seres humanos pensantes. No toleraremos las malignidades. Haití no sufrió un terremoto causado por fallas geológicas inescrutables. Haití fue ante todo objetivo, Haití fue masacrado con las atenuantes de un asesinato, pero no de una sola persona, sino de 200, 000 haitianos.

En consecuencia debemos actuar. Y debemos hacerlo cuanto antes. Existen las marchas, las cartas, las mesas redondas, las revocaciones. Existe Internet, nuestra voz, nuestras sanas conciencias.

Recordemos que a HAARP no lo crearon los inteligentes, sino los perversos, los saqueadores, los inmorales, los traidores del mundo.

Recibieron el Nóbel de Paz: ¡Que sufraguen el premio!

Este es tu planeta, lo fue el de tus padres… y será el de tus hijos.
Este es nuestro tiempo y debemos vivirlo de una forma sana y sin Haarps de por medio.

La Poesía es nuestra Sangre.

Hoy y siempre

Fausto Vonbonek.


HAARP (High Frequency Advanced Auroral Research Project) Significa: Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia. Basa su efectividad en el invento de Nicolas Tesla, croata del siglo pasado y consiste en la colocación en serie de cientos de antenas de alta frecuencia que al ser activadas a un tiempo fusionan sus ondas en una de ellas capaz de emitir hasta 1 GW =1.000.000.000 W, lo que representa un billón de ondas de radio de alta frecuencia que penetran en la atmósfera inferior y rebotan hacia abajo sobre puntos exactos de la Tierra.


http://es.wikipedia.org/wiki/High_Frequency_Active_Auroral_Research_Program

http://www.elpais.com/buscar/con_google/proyecto-haarp

http://www.youtube.com/watch?v=a4ANRe73LKA&feature=related

http://www.youtube.com/watch?v=oHFdda5zaxw


http://www.lacronica.com/EdicionImpresa/EjemplaresAnteriores/BusquedaEjemplares.asp?numnota=666661&fecha=23/01/2010

http://www.bibliotecapleyades.net/haarp/esp_HAARP_0.htm

http://www.primicias.com.do/articulo,32325,html

lunes, 11 de enero de 2010

ALMA DE ALMENDRAS


Me preguntas a mí si las almas de almendra sabrán las
palabras que ayer inventamos
Te respondo que sí
que ellas mismas dotaron de horario al reloj de las sombras
El óleo del día discurre en tu rostro como una obra de arte
Suspiras y entiendes que cada palabra es un lúcido sueño de
un fénix aún virgen
Me preguntas a mí las palabras que ayer inventamos
Las pronuncio una a una como si en ellas volviera a nacer la
memoria que apenas ayer era un flan de vainilla en el medio
del hambre
Dónde inhumamos aquellas palabras de letras inciertas que
iremos a ver ya pasada la vida
Las pronuncio una a una:
gazmandra sarispa azusantu achariel luxamante
Tus ojos evocan sus significados y me hacen temblar la
ilusión de rozar con mis labios la página rota en que
acaba el poema
Hemos estado inventando por horas la orgía de las horas
Eres entonces el único libro en que leo la pasión con que el
tiempo enamora al arcángel terrestre
Las manecillas han sido por siempre la lanza de aquél cuyo
nombre he olvidado
Hoy no me importa si el radio no toca canciones que muevan el
alma
Me he enamorado del péndulo hambriento que vuelve otra
vez a posar su estertor sobre el alma sedienta
No sé si algún día las almas de almendra sabrán las
palabras que ayer inventamos
No sé si estos versos serán recordados pasado el instante o si
en vano transitan
Sólo sé que gazmandra sarispa azusantu achariel luxamante
no son las palabras que ayer inventamos
Porque ayer otra luna ofrendaba su arrope a lengua del lago
Y porque ayer el futuro era un tibio presagio al regazo del cielo
Sólo una pregunta trasciende los siglos
¿Dónde estabas el pasado Pluterday?
Te pregunto y tus ojos se van dilatando a encontrar la respuesta
Puedo escuchar tu silueta perderse en el tiempo como una
espiral que secuestra tus ojos
Dejo que caigas en ese vacío existencial de la cuántica etérea y las
danzas sanguíneas
La canción de la radio repite las mismas palabras que ayer inventamos
Las he pronunciado y tus ojos retornan aquí donde el ovalo abraza el
paisaje
Asomas tu vista a las casas distantes
La calle ha olvidado que debe fingir custodiar a las sombras
Somos transeúntes de un libro perdido
La habitación se despide del resto del mundo y enciende el motor que
nos lleva hasta el punto final de esta página rota


© Fausto Vonbonek

(NOTA: “ ¿Dónde estabas el pasado Pluterday? ” Corresponde al título de la Novela de Ciencia Ficción de Paul Van Herck “Where Were You Last Pluterday?” Editorial Novaro (1973)

sábado, 2 de enero de 2010

VAMPYRUS



Sobre mi féretro,
tú,
luz mujer convertida en la
sangre de un cuerpo en reposo y
de orgías movedizas.
Sabes perfecto que el sol me confiere a
estas sombras constrictas.
Andas ligera como una gacela entre el
mármol que aguarda al vampiro que temes,
y adoras… y temes.
Caminas desnuda con pasos que visten de
envidia a las Evas del viento.
Me ofreces tu danza, tu cuerpo,
tu fruto de diosa y perfume de sangre.
Acepto tu duelo, mujer, Salomé de vampiros,
cazadora del Vlad desalmado y
del hombre en vital somnolencia.
Ahora salgo a beber los volcanes que ofreces,
ahora salgo a saciar tus placeres,
tus ríos desbocados, tu amor, tu lascivia infinita.
Salgo a saciar las nereidas del fuego,
las mil y un sirenas que cantan en ti sus
sonatas sangrientas.
Salgo a aparear las jaurías de mis labios,
salgo a forjar la masacre de luna y de semen carmín aunque el
cenit del fuego calcine de un rayo el total de mis siglos.