miércoles, 29 de julio de 2009

Equilibrista





Suelo ser apacible,
recordar sufragar una risa en algún punto medio de
un día que despierta prometiendo todo y de pronto
está muerto.
Aun así, sobre el día que fenece, bajo el cielo de
un dios prometido por muertos, es casi posible
atisbar un retozo en el karma aún dormido.
Contemplar por segundos la chispa hilarante asediando
las calles.
Conocer de antemano que toda esa intriga buceando en
el aire no escapa jamás al gravamen de un sueño.
Esto es en sí el equilibrio en el diáfano aliento,
el saber que en las gradas azules las nubes no heredan
un hálito humano en la soga que adhiere el temblor de dos polos,
recorrer paso a paso la orgía de la muerte y
sentir su caricia, su aplauso, su tregua infinita.
Soy apacible en la holgura del cielo, soy apacible si
existen gaviotas y graznan su aceite en el llano sin patria,
un vendaval donde todo es infame, todo, salvo este
resquicio de luz que se escapa de un todo podrido en
las cosas de un mundo agrietado al final de mis ojos.

3 comentarios:

  1. UAU me has dejado CONMOVIDA, por la preciosura de este poema.
    Esta bastante pulido, bien definido y...pareciera que duraste como 2 horas c/el diccionario en mano, para buscar palabra por palabra, todo tan pulido y tan elaborado no? Te esmeraste muchisimo en el juego de palabras por lo que veo..

    Esta HERMOSO...lo imagino leido, con toda la soltura y elaboracion, con tiento y tacto...ah, lo imagino leido, esta super hermoso Fausto!! Cada vez me dejas mas impresionada neta me hace f alta escribir asi...
    ... Leer más
    Por otra parte...lo del equilibrista...No le hallo mucha relacion eh? solo por lo de la palabra "equilibrio" la neta...igual se podria llamar "oda a las flores" o algo asi...

    Pero el poema es TAN BONITO! es uno de los mas hermosos que has escrito...

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  2. Annouck, te agradezco todo. Me encanta que puedas sentir el latido en las letras. Te confieso que tienes razón, el poema nació de una forma muy nimia. Únicamente intenté darle forma a un pensamiento ligero que me había nacido, algo muy intrascendente que fue rebasando palabras y súbitamente la Poesía lo arrebató de mis manos. Recuerda que soy su instrumento, la mano que escribe lo que ella musita en mi oído. Ya después, cuando el punto final arribó a este poema, encontré en esa foto un engarce perfecto, por alguna razón tienen algo en común que sublima mi mente. Te mando mi abrazo. Fausto Vnk.

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